En busca de la perfección
La publicidad nos vende la perfección: el cuerpo perfecto, la casa perfecta, los hijos perfectos, el coche perfecto... Nos incita a ser perfectos y a cambiar o eliminar de nuestra vida todo aquello que no lo sea. Si tus tetas no son perfectas te las operas, si tu barriga no es una tableta de chocolate hazte una lipo, ten unos hijos perfectos en un colegio perfecto con un ambiente perfecto, si tu tránsito no es perfecto come yogures....
Lo que se les olvida decirnos es que la búsqueda de la perfección genera infelicidad y estrés.
Buscar la perfección en todo es un trabajo estresante ya que nos obliga a pensar con detalle cada decisión que tomamos: Debería haber elegido otro restaurante en lugar de éste. Estos pantalones quizás no son los mejores y debería haber comprado otros. Esta televisión es muy buena, pero será la mejor?
El psicólogo Barry Schwartz habla de todo esto en su libro The Paradox of Choice y en el programa Redes deEduard Punset.
La clave para ser felices es no buscar la perfección sino algo suficientemente bueno para nuestras necesidades. No necesitamos ir al mejor restaurante sino a uno que cumpla con nuestros gustos de comida y nivel de atención. No necesitamos elegir el mejor de entre los 50 modelos de televisores sino uno que tenga todo lo que necesitamos. De esta manera nuestros niveles de ansiedad e insatisfacción descenderán y seremos mucho más felices.
No tener que tomar la decisión correcta en cada decisión que tomamos, sino una que cubra nuestras necesidades, provoca menos estrés a nuestro cerebro y nos evita un eterno sentimiento de insatisfacción.
En el mundo empresarial se puede aplicar este mismo razonamiento sin ningún problema. No necesitamos el programa perfecto, ni el proveedor perfecto, ni el empleado/jefe perfecto. Sino uno lo suficientemente bueno como para cubrir todas nuestras necesidades.
Por suerte para mí, trabajo en una empresa que ha entendido todo esto desde hace mucho tiempo y cuyo lema es "menos es más". Por eso hacemos programas que no hacen todo sino sólo lo necesario.